GORETZKA EVITA EL DESASTRE
A última hora como un estudiante que presenta su Trabajo Final de Grado o de Máster en el último segundo del plazo permitido, con muchas más dificultades de lo esperado, pero Alemania estará entre las dieciséis mejores selecciones en esta edición de la Eurocopa. Una derrota contra Francia, un triunfo con solvencia frente a Portugal y un sufrido empate ante Hungría es el balance de la selección de Joachim Löw.
Las cosas no empezaron de la mejor manera para la Mannschaft. Szalai adelantó a la selección húngara con un testarazo a centro de Kleinheisler. Poco pudo hacer Neuer para evitar un gol que aupaba a Hungría, a la que no le valía ese resultado ni como mejor tercera clasificada. Alemania se vio fuera de la Eurocopa durante todo el encuentro pese a que dominaba mediante la posesión del balón, pero que no lograba concretar con ocasiones de gol claras.
Durante la segunda mitad, se repetía el mismo guión. Monólogo alemán, resistencia a la numantina por parte de Hungría. El resultado desde el Ferenc Puskás dio por momentos esperanzas a los de Marco Rossi, que con el tropiezo provisional de Portugal se vieron en octavos. Pero Havertz aprovechó un error clamoroso de Gulacsi para poner el empate.
Un empate que duró menos que un caramelo en la puerta de un colegio. Schäfer aprovechó un desajusta de la defensa alemana y una mala salida de Neuer para poner el 1-2 y desatar la locura entre los aficionados húngaros presentes en el Allianz Arena. Ese resultado dejaba a los húngaros en octavos con el 2-2 del Portugal – Francia. Pero como le ha ocurrido en los encuentros anteriores, Hungría acabó muriendo en la orilla. Goretzka, que entró en la segunda mitad, puso el tanto del empate con un zapatazo dentro del área a pase de Musiala.
Con todo, y pese a todos los obstáculos que hubo en el camino, Goretzka deja a Alemania en octavos y salva a Joachim Löw, que hubiese salido tocado de este encuentro de haber perdido y de caer eliminado en primera fase.