Es una cosa curiosa esta de las estadísticas. Ayudan a reflejar lo que sucede sobre el césped, sí. Pero muchas veces no cuentan la historia al completo. Ante el Norwich, por ejemplo, Martin Odegaard dio dos asistencias. Dos más. Pero en el primer gol, a los seis minutos, Bukayo Saka tuvo que hacer la mayor parte del trabajo. Recibió en buena posición, cierto, pero tuvo que encarar a su par y sacar un zurdazo raso para hacer un caño doble a los dos hombres que le tapaban. Mandó la pelota junto al poste, lejos del alcance de Angus Gunn.
Más mérito tuvo el exfutbolista de chandal real madrid 2020/21 y Real Sociedad en el segundo gol. Recibió de espaldas a la portería, en el ángulo entre la línea del centro del campo y la de la banda derecha del ataque del Arsenal. Ante la más que tímida presión de los Canaries, Odegaard tuvo la compostura para girarse y la visión para abrir el juego a la banda izquierda. Por allá llegó Kieran Tierney para doblar la ventaja visitante al borde del descanso.
Mayor influencia tuvo en el último gol del partido, pero la anotación se la apuntó Emile Smith Rowe y Nicolas Pépéhizo lo propio con la faena. Crucial había sido, sin embargo, la participación del ex de Real Madrid y Real Sociedad. Encaró a tres rivales, y esperó al límite para soltar la pelota. Lo hizo en el último momento, dejando solo a su compañero Pépé. Smith Rowe marcó luego a placer.
Este es el contexto por el que transcurre Martin Odegaard. Así se explica mejor la de su juego, que va más allá de los tres goles y las tres asistencias que ha conseguido durante el mes de diciembre. Más allá de ser el futbolista que más ocasiones haya generado en el último mes en la Premier League o el que más balones al espacio haya enviado. Su confianza es la confianza del equipo. El futbolista de 23 años empieza a mostrar el potencial que se le presumía. Está más suelto. Se ofrece, pide, manda. Dirige a sus compañeros con el balón en los pies, señalando los espacios o explicando la llegada de un tercer Gunner a la acción. Aprovecha la explosividad de Bukayo Saka, de Gabriel Martinelli y de Emile Smith Rowe. Se apoya en el resto de jóvenes que, como él, le han cambiado la cara al equipo. El Arsenal es cuarto. Ha sumado cinco victorias ligueras seguidas para auparse hasta puestos de Champions League.